Regresar al origen: Jesús Sánchez Hernández y su repostería

En la cocina de Casa Matilde, ubicada en el corazón de Miguel Auza, Zacatecas, la memoria y la técnica se funden en cada postre. Su creador, Jesús Sánchez Hernández, es un chef pastelero cuya historia es tan profunda como el sabor que imprime en cada tarta: una historia de regreso, de pertenencia y de convicción.

Jesús no siempre estuvo cerca de la gastronomía. Su primer amor académico fue la Biología Marina, carrera que estudió en Los Cabos, sin imaginar que entre hornos y azúcar encontraría su verdadera vocación. Fue durante su formación culinaria cuando se inclinó por la repostería, un mundo que le abrió el panorama emocional y técnico de la cocina, y en el que encontró una manera de expresar cariño hacia los demás. Esa conexión con lo emocional ha sido su brújula desde entonces.

La repostería, para Jesús, es también una forma de honrar a su familia. De ahí nace el nombre Casa Matilde, en homenaje a su tía —aquella figura cálida que horneaba pays y galletas para todos los sobrinos— y de quien heredó la pasión por hornear con amor. Durante más de una década vivió en Zacatecas capital, donde consolidó una clientela fiel, enamorada de la calidad de su trabajo. Pero fue la pandemia lo que lo llevó a tomar una decisión distinta: regresar a Miguel Auza, no como un paso atrás, sino como un acto de visión.

Brava Restaurante y Jesús Sánchez Hernández

Jesús cree firmemente en el valor de hacer gastronomía desde el origen, en diálogo con el territorio, los productos y la gente que los trabaja. Por eso, consumir local no es solo un principio, sino una práctica diaria: leche, huevo, frutas, harinas... todo proviene de productores de la región. Su propuesta va más allá de los postres: es un compromiso con su comunidad. Esta filosofía lo llevó naturalmente a colaborar con Brava, un proyecto con el que comparte ideales: trabajar desde las raíces, enaltecer el talento local y construir puentes entre productores, cocineros y comensales. Como parte de esta quinta colaboración de Brava, Jesús ofrecerá un taller de tartas con técnicas accesibles para que cualquiera pueda replicarlas en casa, además de presentar un postre exclusivo en el menú del restaurante, disponible durante toda la primavera.

“Mi objetivo es compartir lo que hago con mi comunidad. Ese siempre ha sido mi propósito”, dice Jesús. En Brava, celebramos ese propósito y nos honra ser parte de su historia, una que nos recuerda que volver al origen también puede ser el camino hacia adelante.

Jesús Sánchez Hernández

Brava Restaurante y Jesús Sánchez Hernández

Siguiente
Siguiente

Restaurante Brava, apasionados por lo que hacemos